Guardiana de la salud
ocupacional y el medio ambiente

Silvia Rojas Cedeño tiene entre sus manos la responsabilidad más grande de un proyecto de construcción: velar por la seguridad de los trabajadores y el equilibrio con el medio ambiente.

 

Se especializó en ambas ramas, primero con un título en Salud Ocupacional en ULACIT y luego con una Maestría en Modelización, Investigación y Análisis de Riesgo en Medio Ambiente por la Universidad Politécnica de Madrid.

 

Desde el año 2017, es guardiana de la salud ocupacional y regente ambiental en diferentes proyectos de CPM Construcciones. Debutó en la Plaza de la Autonomía de la Universidad de Costa Rica, una obra de alta complejidad que llegó a emplear hasta a 300 operarios entre trabajadores directos y contratistas.

 

“La clave está en estudiar e identificar los potenciales riesgos, y a partir de ahí tomar medidas como implantar el uso de equipos de seguridad. Mediante el diálogo, siempre hemos podido garantizar ambientes seguros para los proyectos de CPM”, explicó Silvia, ataviada por supuesto con chaleco, casco y demás implementos.

 

Esta vecina de San Sebastián heredó de sus padres, don Fernando y doña Miriam, la vocación por el bienestar de los demás, pues él es enfermero y ella fisioterapeuta.

Al estudiar salud ocupacional, se dio cuenta de que podía combinarlo con otra gran fascinación que desarrolló desde pequeña: el gusto por el mundo de las construcciones.

“Siempre me llamó la atención ver que algo se crea desde cero, con el esfuerzo de las personas, que van transformando materiales hasta culminar en una obra”, explicó.

 

Silvia coordina grupos numerosos y variados. En un proyecto hay diferentes cuadrillas que se encargan de todos los procesos; desde los que moldean la estructura en formaleta hasta los que se meten en las entrañas de la instalación eléctrica o aportan la estética final de la pintura y el barniz.

 

“Con todos es importante apelar al diálogo, ejerciendo un liderazgo positivo. Los propios trabajadores entienden que las medidas de seguridad van en su propio beneficio y por eso acatan las directrices, conscientes de que es la mejor manera de regresar tranquilos a sus hogares”, añadió esta vecina de San Sebastián.

 

Su más reciente desafío fue participar en el edificio del Instituto de Investigaciones Farmacéuticas de la UCR, un conjunto de laboratorios y oficinas que requirió de características técnicas muy especiales, y que CPM construcciones entregó inicialmente en febrero pasado. Ahí volvió a desempeñarse con el doble sombrero de salud ocupacional y regencia ambiental. Y cumplió su labor con creces: cero accidentes.

 

“Estar en esta empresa es una experiencia muy gratificante. Me permite el sueño de desempeñarme en el mundo de la construcción, pero además contribuyendo con procesos y obras que sean seguras para las personas y para el medio ambiente”, afirmó Silvia, ha logrado llevar con éxito la responsabilidad de asegurarse que todos los trabajadores saldrán con bien hacia sus hogares.

 

En sus 49 años de historia, CPM Construcciones ha procurado siempre abrir espacios a la participación de las mujeres dentro de la empresa. En este Día Internacional de la Mujer, agradecemos y reconocemos la labor de las compañeras que con su esfuerzo nos permiten seguir construyendo país.